martes, 15 de julio de 2008

EL 20-JULIO, TODOS POR LA LIBERTAD

Tomado del nuevo Siglo

Por Horacio Serpa

El próximo domingo 20 de Julio el país saldrá en masa a las calles a celebrar la liberación de Ingrid Betancourt, tres norteamericanos y once miembros de la Fuerza Publica en poder de las FARC, algunos desde hace más de una década. Las imágenes inolvidables y conmovedoras de esos compatriotas volviendo del infierno del secuestro le han dado la vuelta al mundo y han ratificado que el secuestro es un delito de lesa humanidad, repudiado internacionalmente, que se ha convertido en el principal deslegitimador de las FARC y el ELN.

Gracias al secuestro de los llamados canjeables, las FARC son hoy consideradas la organización guerrillera más cruel del globo, y un cartel del narcotráfico que amenaza la democracia. Una especie de anti Midas que quema todo lo que tocan o a todos los que se les acercan.
Por eso, la marcha del 20 de Julio, o el 20-J, tiene que ser una jornada para exigir la liberación de todos los secuestrados, pero sobre todo, el fin del secuestro como instrumento de lucha política y de extorsion.

El secuestro es la principal arma de autodestrucción de las FARC y el ELN. Nada los ha deslegitimado tanto, ni evidenciado tanto la falta de una estrategia política que les permita conectarse con la Colombia moderna, que reclama reconciliación para seguir progresando y alcanzar la felicidad.
La marcha del 20 de Julio tiene que convertirse en un nuevo grito de independencia frente a los violentos de todas las calañas. Porque lo que reclama la nación es paz y no mas guerra. Una paz definitiva.

Las FARC y el ELN tienen que escuchar el clamor nacional e internacional. En la selva deberían estar pensando en sentar las bases de un nuevo proceso de paz, sincero, claro y contundente, que le permita a Colombia concentrar todos los esfuerzos en la construcción de un país de igualdad, solidaridad y democracia.

Mientras existan secuestrados, de la guerrilla, paramilitares, narcotráfico o delincuencia común, Colombia seguirá siendo un país inseguro.

Por eso hay que derrotar el secuestro y exigir que mientras llega la paz, las guerrillas respeten las normas del derecho internacional humanitario. Tienen que liberar a todos los secuestrados. Tienen que dar por terminada su estrategia de financiación y chantaje a la nación. Tienen que demostrar con hechos que tienen sentido común y visión de futuro.

En Santander saldré a marchar con mi familia y mi equipo de gobierno por la libertad de todos los plagiados, por el fin del secuestro, la paz negociada y el derecho a vivir en paz.

Colombia le ha dado un mandato contundente a la reconciliación. De las guerrillas depende que esta se consiga sin derramamiento de sangre y sin destrucción. Es en el escenario político en donde se hacen hoy las revoluciones, en la boca de las urnas, no en las bocas de los fusiles. La democracia es el futuro. Regresara Inicio > Titulares >

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...