Tomado de SEMANA
El duro editorial de ‘The
Economist’ contra Uribe
La revista británica dedica un
editorial al proceso de paz y a la fuerte oposición del uribismo.
Álvaro Uribe e Iván Márquez Foto: Archivo SEMANA |
La prestigiosa revista
británica The Economist dedicó su más reciente editorial al proceso de paz en
Colombia, con el título “Ladran los perros en Colombia”. El artículo recalca la
intransigencia de las FARC, pero rescata el hecho de que dos años después
todavía los diálogos tengan vida.
“El avance ha sido lento. Las
partes han logrado acuerdos provisionales sólo en los tres puntos más fáciles
de la agenda –desarrollo rural, participación política y narcotráfico–”. The
Economist asegura que las FARC no tienen afán en acabar con un conflicto de más
de 50 años y que después de que el presidente Santos anunció su gira por Europa
en busca de recursos económicos para el posconflicto, las conversaciones
enfrentan la oposición más fuerte hasta el momento.
La influyente publicación
ubica al expresidente y hoy senador Álvaro Uribe Vélez como el máximo líder de
la oposición. “El señor Uribe desata una artillería diaria de vituperaciones en
contra de su colega… En más de 30 trinos al día, Uribe hace afirmaciones
extravagantes: por ejemplo, que Santos ‘favorece el liderazgo político de los
secuestradores y la entrega del país a las FARC’”.
La revista reconoce que
existen desacuerdos legítimos acerca de los diálogos y que muchos colombianos
no aprueban un posible fin democrático para la guerrilla, donde sean indultados
sus atroces crímenes. Sin embargo, criticó el hecho de que Uribe ignorara la
oferta de Santos para discutir sus preocupaciones e indicó que “las FARC son
tan intransigentes como Uribe”, refiriéndose al momento en que Iván Márquez
dijo que las conversaciones no habían llegado a una etapa final, desmientiendo
así al presidente Santos.
La llegada de altos mandos
militares y algunos de los principales jefes guerrilleros a la mesa de
negociaciones fueron los hechos que, según The Economist, hicieron que el
senador Uribe calificara las llegadas como un “congreso terrorista en La Habana”,
apoyado por el gobierno nacional. “Eso suena como una tontería: las FARC se
enfrentan a decisiones trascendentales; poner fin a su guerra necesita de un
frente unido en su propia organización”, asegura la revista.
La editorial considera que el
tiempo es el factor crítico, ya que Santos se equivocó al poner un límite a las
negociaciones, el cual ha sido ignorado por la guerrilla. Además, a los
británicos les resulta preocupante que las conversaciones se lleguen a estancar
puesto que perderían credibilidad.
Finalmente, The Economist
cierra con una reflexión que podría no dejar muy conforme a Uribe. “En cuanto a
Uribe, no puede admitir que las conversaciones ofrezcan la mejor oportunidad de
poner fin a un conflicto que ha agobiado a Colombia con muerte, destrucción y
desplazamiento de millones de personas. La ironía es que fue su política de
seguridad la que obligó a las FARC a negociar. ¿Cómo se explica su campaña? En
Bogotá se atribuye indistintamente a la envidia, la obsesión irracional y la
ira de que funcionarios de su gobierno sean acusados de corrupción. Santos
presume que ‘tal vez él piensa que su capital político desaparecerá si hay
paz’. Como reza un dicho atribuido a Don Quijote: ‘Deja que los perros ladren,
Sancho, es señal de que estamos avanzando’”. (Lea la editorial completa que The
Economist dedicó al Proceso de Paz)