Al contrario de la frase celebre de Maturana de que perder es ganar, al PIN en su destino político, va a tener que aplicar el principio de que en situaciones como estas Ganar es perder.
Naturalmente que haber logrado el PIN el pasado 14 de Marzo una votación cercana a un millón de votos en Colombia fue para cualquier analista un aparente éxito electoral, sin imaginar que ahí estuviera su final , cavaron su propia tumba a cuenta del debate inmediato que abrió la ciudadanía y los medios de comunicación sobre los resultados de un partido bastante cuestionado en la forma de ejercer la política.
Debemos reconocer la gallardía como diferentes candidatos presidenciales rechazaron cualquier posibilidad de acuerdo con el PIN, la contundencia con que lo expresaron, es Por ahí Colombianos cerrando los espacios de gobernabilidad a sus representantes , blindando las instituciones del acceso a las mismas de partidos cuestionados.
Queda demostrado que elecciones gana cualquiera con dinero y otras ayudas, pero que si la mayoría nos ponemos de acuerdo, esos elegidos en esas condiciones no tendrán espacio para su ejercicio y así el electorado comprenderá que no puede volver a perder su voto , porque nuestro voto debe ser Útil y por demás libre y transparente. Por ahora los señores parlamentarios deberán dedicarse a ganar su sueldo pues ya están elegidos y el estado les ofrece sus garantías legales, pero desde ya se avizora una pobre labor funcional.
Quiero dejar en claro mi posición política de ciudadano liberal, defensor de las instituciones publicas y de la sana política, rechazo completamente el principio que viene haciendo carrera a la hora de hacerse elegir de que el fin justifica los medios.