------------------------------------Por: JOSE OSCAR FAJARDO
SE LES HABÍA ADVERTIDO
Hace ocho días y exactamente dos días antes del partido entre Colombia y Argentina, yo afirmaba que el seleccionado nacional, así como mi amigo El De malas, al que hice referencia y de quién conté el 0,000001% de sus geniales burradas, tenían el diablo metido en el centro del alma y observen que no me falló. Eso es como saber que hay uvas. Algunos pensarán, otra vez la burra al trigo hablando de ese partido. Y la verdad es que yo tampoco quisiera hablar de tan manoseado tema y de tan lamentable hecho que enluta los corazones de los fanáticos de la selección. Pero ojo que la eliminatoria apenas está comenzando y las cosas que están torcidas se pueden enderezar.
Sólo hay que ponerle lógica y voluntad. Además se trata de un deporte, no de una guerra internacional. Porque si de eliminados hablamos, tranquilos que en varias ocasiones no han ido al mundial potencias futboleras como Inglaterra, Holanda, Suecia y Portugal. Hace rato no va Hungría, la tierra de Sandor Kocsis y de Ferenc Pusckas, grandes leyendas del deporte de la pelota y los pies. Y así muchos otros más. De tal manera que por eso no se preocupen. Pero eso que yo estoy diciendo es un paliativo de la enfermedad porque está demostrado científicamente que las cosas se parecen a su dueño y toda ilusión es un ensueño. Fíjense que la selección colombiana de fútbol es sólo un espejo que produce imágenes reales. Es que la crisis que vive la selección Colombia es el fiel reflejo de la crisis que vive el país. Son crisis heredadas de las cuales no se le puede hachar la culpa al gobierno actual. Les voy a graficar esta perorata para que se pellizquen.
Uno. ¿En qué se parece la crisis de la selección Colombia, a la crisis de la educación en Colombia? En que ninguna de las dos da pie con bola y así como la selección no es otra cosa que un rezago a nivel mundial, de igual manera ninguna universidad colombiana aparece entre las 500, oído, quinientas, mejores del mundo. Eso sin rezongar nada del bachillerato que es infinitamente peor. Dos. ¿En qué se parece la selección Colombia a la salud en Colombia? No será en la eficiencia, en la eficacia, en la ética y la moral y sobre todo de la profesionalidad con que la ejercen los encargados de ella, o mejor dicho los dueños. Los paseos de la muerte y el saqueo de los fondos para la salud en Colombia, son como cualquier partido de fútbol de menesterosos que se juega en cualquier calle destartalada de cualquier pueblo del carajo en este país: comunes y corrientes. Tres. ¿En qué se parece la selección Colombia a la Paz en Colombia? Que a la selección Colombia el triunfo en un partido se le celebró como si ya con él quedara clasificada, y de la Paz se hace alarde porque se mató a un cabecilla, pero ponen ojos ciegos y oídos sordos a que el 80% aproximadamente de la violencia en Colombia, la genera la violencia intrafamiliar, sobre todo en los estratos 2,1,0,-1,-2; la prostitución no de alta alcurnia sino la prostitución callejera de niños y niñas incluso desde los diez años de edad, a lo que va sumado el alcoholismo hasta con bebidas inventadas, la drogadicción hasta con drogas inventadas de manera silvestre por carencia de medios y por la presencia de estas enfermedades sicosomáticas; el robo, el atraco callejero, la extorsión, el paseo millonario, y… para qué te digo más. Entonces por qué no mejor invertirle corazón y meterle plata a la gente. ¿Por qué no invertir en los seres humanos? En distribución del ingreso Colombia es uno de los peores países en el mundo y el segundo peor en América después de Haití.
A la selección lo que hay es que ponerle un DT de 250 mil dólares mensuales, serio y experimentado, porque así como hay plata para la guerra, tiene qué haber plata para la paz. Y además, tumbar la actual camarilla dirigente para que el mal quede curado más o menos de raíz. De lo contrario, olvídense de mundial.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario