En unas acciones
recientes –de las tantas que ocurren en una campaña- una aspirante a la
nominación presidencial, hacía guiños para llegar a otro movimiento político,
no muy afortunado en su credibilidad, arguyendo que buscaba una agrupación que
brillara en la pulcritud… (da risa) Pero que tristeza para quienes le crean
semejante falacia y, a donde, quiere llegar, solo con apetitos politiqueros,
pero muy desafortunada porque esa fracción política va en decadencia según los
últimos comicios. Ahí sí se puede aplicar el viejo adagio: salió de guama… para
llegar a Guatepeor.
Esos
políticos de oficio, como dice la canción, están mandados a recoger por sus
propias acciones desventuradas y los electores deben dejarlos a un lado, porque
no representan ni garantía, ni reflejan respeto por los colombianos.
Otra y otros dirigentes
políticos de vieja data repetían la misma frase de ‘cajón’ que han venido diciéndole a sus seguidores por años: ‘quiero defender la democracia
que está amenazada’. Pero en una buena traducción de esa frase, lo
que quieren esos políticos es defender sus propios intereses, sus posiciones y
privilegios, para seguir viviendo del estado y de los colombianos sin retribuir
en manejo de los bienes públicos cuando llegan al poder.
Y es que los
electores no debemos ser tan ilusos, tolerantes,
olvidadizos y hasta alcahuetas encubridores, porque, los políticos que
hacen promesas y promesas, no son nuevas, son las mismas que hace 4, 8, 12, 16
y más años, nos han expuesto como planes nuevos de acción gubernamental y dónde
se han cumplido ni en la más mínima parte.
En Colombia
como en otros países donde la politiquería brilla gracias a los electores y gracias a quienes no votan, cada día se
hace menos ambiente de vida en diferentes aspectos.
Los electores
que se dejan manejar como humildes ovejas
y bo… de los hábiles políticos que, a pesar de su retracción, enmascaran a segundos
y terceros para engañar a sus víctimas, serán los responsables de las tristes y
desalentadoras épocas que tendremos que vivir los colombianos en un inmediato
futuro.
El 29 de mayo
los millones de ciudadanos aptos para sufragar en Colombia, tenemos la
responsabilidad de elegir el país en el que queramos vivir. Y si no lo hacemos bien, no lancemos reproches en el
futuro. Si seguimos con los mismos y
con las mismas,… no
esperemos nada nuevo. Ya somos mayores y decidiremos por nosotros y la familia.