Por: Martha Clemencia González M. -
Correo: alejanico@yahoo.com
"Es hora de defender el honor nacional". Esta es una afirmación hecha recientemente por el Señor Juan Gossaín, director nacional de noticias en RCN - Colombia.
Se refería Juan en su editorial a los constantes ataques de los que está siendo víctima Colombia, como institución y como país, por parte del presidente de Venezuela.
Dentro del editorial, propone el Señor Gossaín, que los colombianos asumamos de una buena vez una actitud de defensa de nuestro honor y dejemos que Venezuela, actúe como ha amenazado en diferentes oportunidades, en relación con los dólares que recibe Colombia como resultado de mantener estrechos vínculos comerciales con el vecino país.
El director nacional de noticias en RCN, se disculpó, de antemano, con todos los gremios y asociaciones de agricultores, productores y comerciantes colombianos, a sabiendas que seguramente las consecuencias económicas de decirle a Venezuela: "estamos hartos de los insultos y de las descalificaciones..llévese sus dólares para donde quiera", se notarán considerablemente; pero hizo alusión al alivio que seguramente sentirá Colombia por dejar de estar supeditado cual ser inferior a los caprichos, amores y desamores de quien supuestamente le ayuda, para luego maltratarle y subyugarle.
Debo decir que como colombiana, aplaudo totalmente lo sugerido por el señor Juan Gossaín y celebro que se motive al país a pensar con serenidad sobre esta posibilidad de dejar de lado, por lo menos por ahora, las relaciones comerciales con Venezuela y abrir camino hacia otros mercados, seguramente más serios y sobre todo respetuosos de nuestra idiosincracia y de nuestra virtudes como Nación.
No podemos estar supeditados a la verborrea del presidente del vecino país, bajo el pretexto de que ellos son el segundo socio comercial de Colombia, después de Estados Unidos.
Hasta la saciedad se ha demostrado que un personaje que habla siempre en caliente y sin medir el daño emocional que incluso pueden ocasionar sus constantes declaraciones plagadas de insultos y desdeño; no merece tener relación con un país que como Colombia, pese a quien le pese, se ha caracterizado por ser absolutamente respetuoso, amable, cordial, educado y sobre todo cuidadoso de su relación con el resto del mundo.
De los vínculos que pueda o no tener el presidente de Venezuela con la guerrilla, darán cuenta las autoridades tarde o temprano; pero aún así esa sombra de duda podría en determinado momento ser un argumento más para no aceptar la "ayuda" o la asociación, con personas públicas que ocupan la presidencia de un país , pero que a pesar de esta altìsima designación, son incapaces de mostrarse claros, por lo menos para mi no, en su posición frente a lo que es terrorismo y lo que no lo es.
Al editorial del señor Gossaín yo agregaría una obviedad que frecuentemente se olvida y que quiero dirigir a mis colegas de los medios: la publicidad mala o buena, siempre es publicidad y son los medios de comunicación los grandes poderosos a la hora de mover masas; así que por qué no censurar tanto discurso flojo, sin contenido nuevo, sin propuestas serias, repleto de irrespeto y de descortesía por parte del presidente en el vecino país?. Por qué no dejar de nombrarle y de servir de publicadores constantes de sus "reflexiones".,,más bien de sus ataques?. Podrían estar los periodistas atentos, como es su deber a esta fuente; pero no vivir supeditados a ella. Si lo que diga no sirve y de nuevo agrede a Colombia, no se publica y listo. Cuando hable con sensatez y cordura, contará con los canales y medios de comunicación para que la gente le escuche, pero no cada día para tan solo hacer pasar malos ratos a oyentes, televidentes y lectores. No se presten más, amigos de los Medios de Comunicación en Colombia a este círculo vicioso en el que al final resulta ganador este personaje que preside al vecino país, mientras que los colombianos quedando a merced de lo que decidan publicar los Medios, nos vemos obligados a asumir el papel de masoquistas y por qué no de marionetas frente a esta situación.
Cuál es el miedo a este tipo de censura?...no se cansa, acaso, el presidente de Venezuela de censurar la actividad de los Medios de Comunicación en su propio país?..dónde está la obligación de los colombianos de escucharle todos los días?..por Dios, si es que ocupa más tiempo él en los medios de Colombia que nuestros propio Presidente !..qué sentido tiene esto para la salud institucional de una Nación?..que favor le están haciendo los Medios de Comunicación al país, al saturarlo de tanta información "basura", porque evidentemente no es otra cosa lo que representan los discursos y barbaridades que todos los días habla el presidente venezolano. No es hora ya de hacer un análisis real de los contenidos y dejar de emular el mal hacer de algunos con el pretexto de que es un "personaje muy peculiar..muy particular...muy popular"...Si no dice nada que valga, no merece salir en los medios de nuestro país !.
Mi respeto, por supuesto a todo el pueblo venezolano..no es a ellos a quienes dirijo mi comentario y de hecho, gracias a Dios !, hay relaciones entre los dos países, de carácter personal, familiar y social que ni su presidente, ni el nuestro ni nadie podrán nunca tocar. Ante todo y por fortuna, estamos las personas y eso sí que vale !. Volver a pág de España > Inicio >
"Es hora de defender el honor nacional". Esta es una afirmación hecha recientemente por el Señor Juan Gossaín, director nacional de noticias en RCN - Colombia.
Se refería Juan en su editorial a los constantes ataques de los que está siendo víctima Colombia, como institución y como país, por parte del presidente de Venezuela.
Dentro del editorial, propone el Señor Gossaín, que los colombianos asumamos de una buena vez una actitud de defensa de nuestro honor y dejemos que Venezuela, actúe como ha amenazado en diferentes oportunidades, en relación con los dólares que recibe Colombia como resultado de mantener estrechos vínculos comerciales con el vecino país.
El director nacional de noticias en RCN, se disculpó, de antemano, con todos los gremios y asociaciones de agricultores, productores y comerciantes colombianos, a sabiendas que seguramente las consecuencias económicas de decirle a Venezuela: "estamos hartos de los insultos y de las descalificaciones..llévese sus dólares para donde quiera", se notarán considerablemente; pero hizo alusión al alivio que seguramente sentirá Colombia por dejar de estar supeditado cual ser inferior a los caprichos, amores y desamores de quien supuestamente le ayuda, para luego maltratarle y subyugarle.
Debo decir que como colombiana, aplaudo totalmente lo sugerido por el señor Juan Gossaín y celebro que se motive al país a pensar con serenidad sobre esta posibilidad de dejar de lado, por lo menos por ahora, las relaciones comerciales con Venezuela y abrir camino hacia otros mercados, seguramente más serios y sobre todo respetuosos de nuestra idiosincracia y de nuestra virtudes como Nación.
No podemos estar supeditados a la verborrea del presidente del vecino país, bajo el pretexto de que ellos son el segundo socio comercial de Colombia, después de Estados Unidos.
Hasta la saciedad se ha demostrado que un personaje que habla siempre en caliente y sin medir el daño emocional que incluso pueden ocasionar sus constantes declaraciones plagadas de insultos y desdeño; no merece tener relación con un país que como Colombia, pese a quien le pese, se ha caracterizado por ser absolutamente respetuoso, amable, cordial, educado y sobre todo cuidadoso de su relación con el resto del mundo.
De los vínculos que pueda o no tener el presidente de Venezuela con la guerrilla, darán cuenta las autoridades tarde o temprano; pero aún así esa sombra de duda podría en determinado momento ser un argumento más para no aceptar la "ayuda" o la asociación, con personas públicas que ocupan la presidencia de un país , pero que a pesar de esta altìsima designación, son incapaces de mostrarse claros, por lo menos para mi no, en su posición frente a lo que es terrorismo y lo que no lo es.
Al editorial del señor Gossaín yo agregaría una obviedad que frecuentemente se olvida y que quiero dirigir a mis colegas de los medios: la publicidad mala o buena, siempre es publicidad y son los medios de comunicación los grandes poderosos a la hora de mover masas; así que por qué no censurar tanto discurso flojo, sin contenido nuevo, sin propuestas serias, repleto de irrespeto y de descortesía por parte del presidente en el vecino país?. Por qué no dejar de nombrarle y de servir de publicadores constantes de sus "reflexiones".,,más bien de sus ataques?. Podrían estar los periodistas atentos, como es su deber a esta fuente; pero no vivir supeditados a ella. Si lo que diga no sirve y de nuevo agrede a Colombia, no se publica y listo. Cuando hable con sensatez y cordura, contará con los canales y medios de comunicación para que la gente le escuche, pero no cada día para tan solo hacer pasar malos ratos a oyentes, televidentes y lectores. No se presten más, amigos de los Medios de Comunicación en Colombia a este círculo vicioso en el que al final resulta ganador este personaje que preside al vecino país, mientras que los colombianos quedando a merced de lo que decidan publicar los Medios, nos vemos obligados a asumir el papel de masoquistas y por qué no de marionetas frente a esta situación.
Cuál es el miedo a este tipo de censura?...no se cansa, acaso, el presidente de Venezuela de censurar la actividad de los Medios de Comunicación en su propio país?..dónde está la obligación de los colombianos de escucharle todos los días?..por Dios, si es que ocupa más tiempo él en los medios de Colombia que nuestros propio Presidente !..qué sentido tiene esto para la salud institucional de una Nación?..que favor le están haciendo los Medios de Comunicación al país, al saturarlo de tanta información "basura", porque evidentemente no es otra cosa lo que representan los discursos y barbaridades que todos los días habla el presidente venezolano. No es hora ya de hacer un análisis real de los contenidos y dejar de emular el mal hacer de algunos con el pretexto de que es un "personaje muy peculiar..muy particular...muy popular"...Si no dice nada que valga, no merece salir en los medios de nuestro país !.
Mi respeto, por supuesto a todo el pueblo venezolano..no es a ellos a quienes dirijo mi comentario y de hecho, gracias a Dios !, hay relaciones entre los dos países, de carácter personal, familiar y social que ni su presidente, ni el nuestro ni nadie podrán nunca tocar. Ante todo y por fortuna, estamos las personas y eso sí que vale !. Volver a pág de España > Inicio >
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