Trafugario
Por: José Óscar Fajardo
Hoy hace ocho días ha debido
publicarse en este mismo sitio un escrito en el cual yo les contaba que en mi
última novela, ya publicada y que tiene como título EL CANDIDATO DE LOS
DIFUNTOS, el personaje central profesor y metafísico Corleone Malezza
Napolitano, brujo estrictamente barboseño e hijo de un policía cascorvo y cuyo
nombre real es Endometrio Guavatá, predice dentro del texto que el país
entraría en un desangrante deterioro tanto económico como político y
social si llegase a ganar la elección
presidencial cualquiera de los candidatos teledirigidos por el otrora
mandatario Nabucodonosor Cristanchi al poder. En horabuena no ocurrió así. Tengo
que aclararles de antemano a los lectores que, unos tres días antes de la
última contienda electoral estuve
hablando personalmente con le parasicólogo Malezza y él me dijo que
efectivamente eso era cierto indiscutiblemente. Que el presidente sería, por
otro periodo más, el doctor Juan Manuel Santos, y que eso no sólo lo sostenía
él, Malezza, como legítimo brujo que era, sino porque si además Dios creador
del universo se equivocaba en eso, de hecho nos estaba sentenciando con el
juicio final. Para mayor confianza de ustedes también debo comentarles que el
profesor Malezza es el director general del CEFOU (Centro de Fuerzas Ocultas
del Universo) sitio donde prácticamente
se guardan todos los secretos del mismo, del universo, no de Malezza, y que por
eso él sabe lo que va a ocurrir hasta en un rango de los futuros cien años
contados a partir de la fecha. (Consultar texto EL CANDIDATO DE LOS DIFUNTOS).
Como ustedes pueden darse
cuenta, en eso Malezza acertó. También me habló que la selección de fútbol
colombiana quedaría campeona en este mundial, que el ingreso per cápita subiría
prodigiosamente y por arte de la lámpara de Aladino a cerca de cinco mil dólares
mensuales, que los Nule y los Moreno Rojas iban a conseguir la libertad
incondicional porque ellos no se habían robado nada sino que la plata del Estado
los perseguía misteriosamente adonde ellos fueran como las mariposas amarillas
a Mauricio Babilonia en Cien años de soledad. Que Pacho Santos
indefectiblemente sería alcalde Bogotá y que el actual Procurador General de la
Nación sería uno de los principales dirigentes de la UP. Que Viki Dádiva y
Piadosa Gurisatti sería abnegadas y gentiles colaboradoras del doctor Santos.
Entonces ahí fue donde yo me pellisqué de sus aberraciones conceptuales e
ipsofacto le exigí que dejara de meter tanta marihuana con hojas secas de
adormidera y borrachero y picadito de mejoral porque no sólo podía causar una
gran catástrofe política nacional, sino porque además Lucifer ya estaba arrecho
como cualquier santandereano de Vélez o
de Guavatá que le estuvieran endilgando, sin respeto alguno, que todas las
chuzadas eran culpa o artimaña de él, de Lucifer. Entiéndase por chuzada la
herida profunda que se causa con un chuzo. (Consultar el texto EL CANDIDATO DE
LOS DIFUNTOS).
Para mayor orientación de mis
muy queridos lectores y, para que sepan más cosas que son increíbles secretos
hasta el día de hoy tanto en la política como en la economía y mejor dicho en
todos los ámbitos sociales, ustedes están en la obligación de consultar este
texto que es todo un manual de derecho administrativo nacional e internacional,
y donde se narran hechos tan fantásticos y estrafalarios que el lector corre el
riesgo de morirse de la risa. “Los políticos por nuestra propia naturaleza
somos unas coscorrias”, dice el
presidente de Crazy Port en una pieza oratoria “regurgitada” el día nacional de
la democracia celebrado en esa pintoresca nación, Crazy Port, no se ha podido saber en qué rincón de este
descachimbado planeta. Lo verídico es, sostiene Malezza, que con la paz, ahora
sí Colombia tendrá Cien años de felicidad.