
Un hombre, que si se examina su lenguaje expone los principios que profesa en forma similar al maestro de galilea, en parábolas. Sigue la iglesia católica considerando que no es solamente en su gobierno, la vigencia de Roma o europeos, sin dejar de lado los extremos que han orientado rusos y alemanes para considerar cultores de una lengua que abarca también amplio espectro de ella, el castellano, en América desde luego de origen europeo.
Quizá lo más importante sea
que el cardenal ahora papa Francisco, pertenezca a una de las corrientes
intelectuales si se quiere a la más notable por sus avances ideológicos como
son los jesuitas. Si bien su orientación ha marcado un hito en lo eclesial no puede
decirse que sean cultores de pensamiento anquilosado, sino por el contrario,
orientado por teorías de avanzada, sin mirar las persecuciones de que han sido
objeto, siempre han tenido en alto las banderas del saber y la comprensión para
que dentro de la espiritualidad se confronten las teorías que van surgiendo en
la evolución del pensamiento incluyendo los católicos y que sin la dispersión
de las jerarquías va transformando el común devenir de la iglesia y de sus
feligreses que están expectantes a los giros que pueda dar la iglesia católica
para adaptarse al mundo moderno en la misma forma que ya lo ha hecho al aceptar
la evolución de los descubrimientos y resolver los comportamientos en los
cuales ha tomado parte, pero dentro de la solemnidad, se mantenía en la ausencia
de divulgación.
Ojala con el nuevo director de
almas se entre a la aceptación de verdades humanas.
Le quedan retos que es ya
vislumbro su predecesor, reflejando su renuncia a la defensa de lo existente,
frente a realidades no de fácil comprensión de cara a los postulados
altruistas, espirituales y decisión del más allá, frente a las realidades
terrenales que deben hacer simbiosis para la perfección del ser humano.
La iglesia católica en este
orden celebró otra semana Santa con todas sus galas con el nuevo
jerarca de la cristiandad en el mundo.